A-DERMA lleva casi 40 años aplicando un enfoque singular a las pieles frágiles, desde el punto de vista dermatológico.
¿Qué es la piel frágil? Es una piel hipersensible.
En 2014, gracias a la colaboración con expertos internacionales, A-DERMA publicó una definición científica de la piel frágil: piel desequilibrada que tiene menos resistencia a las agresiones. En otras palabras, una piel con una barrera cutánea vulnerable.
Como primera marca dermatológica especializada en pieles frágiles, hemos dado un paso más y hemos demostrado que no hay un solo tipo de piel frágil, sino muchos. ¿Qué tienen en común? Una necesidad de eficiencia y de productos verdaderamente seguros que guía nuestro enfoque cada día, en cada etapa del diseño de nuestros productos.
de personas con piel caucásica del norte (Suecia, norte de Francia)
de personas con piel caucásica del sur (España, sur de Francia)
de personas con pieles asiáticas
de personas con piel negra
Ya sea niño o adulto, hombre o mujer, todos tenemos la piel frágil en algún momento de nuestra vida. La piel de los bebés es intrínsecamente frágil, al igual que la piel seca o envejecida. Pero la piel también puede volverse frágil como consecuencia de una agresión, como el sol, o por una patología, como las espinillas o la dermatitis atópica. La fragilidad no siempre está donde crees que estará.
La piel indefensa y frágil requiere un cuidado suave pero eficaz. Para desarrollar una línea de productos a medida capaces de calmarla, protegerla y cuidarla, en A-DERMA hemos realizado nada menos que 214 estudios clínicos en más de 36 000 personas, hemos presentado 22 publicaciones científicas internacionales** y somos socios de una red de 45 000 médicos*. El desarrollo de cada uno de nuestros productos se inspira en nuestro fuerte rigor farmacéutico para ofrecer la solución más adecuada para cada tipo de fragilidad.
