Eczema de oreja: causas, síntomas y tratamiento

Dormir profundamente es una expresión que puede dejar de tener sentido cuando empiezan a producirse molestias en esta zona ¿Sientes comezón alrededor de la oreja o quizás dentro de esta? ¿Está la piel enrojecida, tal vez un poco hinchada o incluso duele al tacto? Lo más probable es que se trate de un eczema de oreja. 
Veamos por qué y cómo puede aparecer el eczema de oreja, y qué hacer para evitarlo en la medida de lo posible. 

¿Qué es el eczema de oreja?

Cuando la piel está irritada, aparece un enrojecimiento localizado y hay un impulso incontrolable de rascarse la zona afectada, probablemente se trate de un eczema de oreja. Esto puede afectar a todo el mundo. Pero no te preocupes, no es contagioso. Ante todo, es importante comprender qué puede haber desencadenado su aparición: ¿piel seca con tendencia al eczema atópico, irritación o una alergia tras el contacto de la piel con un alérgeno? En todos los casos, no dudes en consultar a un profesional médico para que confirme el diagnóstico y te oriente en su tratamiento.

El eczema de oreja puede afectar lo siguiente:

• Fuera y alrededor de la oreja, especialmente el lóbulo.
• La parte posterior de las orejas.
• El interior de la oreja, en los pliegues, y el conducto auditivo externo.

Eczema alrededor de las orejas y en el lóbulo de la oreja

El eczema en los pliegues o el lóbulo de la oreja tiene al menos la ventaja de ser más fácil de detectar: la piel está enrojecida, muy seca, hinchada o incluso supura, y pica. El eczema en esta zona puede provocar lesiones dolorosas que favorecen la infección. No dudes en consultar rápidamente a tu dermatólogo para recibir el tratamiento adecuado, y evitar así que el eczema se extienda al interior de la oreja.

Eczema en la oreja

En el caso del eczema en la oreja, es el conducto auditivo externo el que se ve afectado: si bien es frecuente en adultos, también puede afectar a los niños. En todos los casos, es necesario consultar a un especialista para evitar cualquier riesgo de sobreinfección y no dañar el tímpano. El eczema en la oreja suele ser común en las personas que nadan con regularidad. 

Existen varias causas de eczema de oreja, las principales incluyen las siguientes:

Eczema por contacto debido a una reacción alérgica en las orejas.

En efecto, el eczema de oreja puede ser el resultado de una reacción alérgica tras un contacto repetido con un alérgeno, y puede aparecer de repente: es lo que se denomina eczema por contacto o dermatitis por contacto. Tu sistema inmunitario se vuelve hiperactivo y crea una reacción inflamatoria en la piel de las orejas. Si sufres eczema de oreja, haz una lista de los productos que utilizas a diario y comprueba si tu eczema mejora cuando procuras limitar o evitar el contacto con la piel. 

Dermatitis atópica en las orejas

¿Tienes tú (o tu hijo) la piel seca con tendencia al eczema atópico? ¿Notaste ya la aparición de ronchas rojas que pican en varias partes del cuerpo? ¿Apareció recientemente este enrojecimiento y comezón en las orejas y, en particular, en las hendiduras bajo el lóbulo? Probablemente se trate de un eczema atópico de las orejas. 
Este tipo de eczema en las orejas está relacionado con una afección cutánea denominada dermatitis atópica, de carácter hereditario y que suele aparecer en la primera infancia: la piel es naturalmente más frágil y, por lo tanto, más reactiva de lo normal, no desempeña correctamente su papel de barrera, su película protectora no protege bien contra las agresiones externas y, en consecuencia, se produce una reacción inflamatoria crónica. 

Eczema de oreja relacionado con la humedad

A veces, el eczema de oreja puede deberse a un exceso de humedad en el conducto auditivo o en la parte posterior de la oreja, como ocurre al nadar con regularidad, como es bien sabido en el caso de los nadadores, o como consecuencia de no secarse bien las orejas después de la ducha. Esto provoca la maceración de la piel, lo que puede provocar eczemas. Y si estás en un país caluroso, donde hay mucha humedad en el aire, ten mucho cuidado para evitar cualquier molestia.

Eczema de oreja psicológico relacionado con el estrés

Lo que es seguro, es que el estrés y el eczema no son una buena combinación. Pero nunca es la causa del eczema, ya sea en las orejas o en otra parte del cuerpo. El origen del eczema de oreja debe buscarse en otra parte: ¿alergia? dermatitis atópica hereditaria? ¿edad? Sin embargo, aprender a manejar mejor el estrés (mediante técnicas de relajación, respiración y masaje, por ejemplo) es esencial para hacer frente a un brote de eczema. 

Alivio del eczema atópico de orejas 

Los siguientes tratamientos pueden utilizarse para proporcionar un alivio inmediato del eczema atópico de orejas, reducir la comezón y prevenir nuevas infecciones:

• Aplica cremas y pomadas locales de cortisona prescritas por tu médico en las zonas afectadas, o antibióticos si hay algún signo de sobreinfección.
• Repara, hidrata y protege la piel de la oreja aplicando diariamente emolientes específicamente formulados para la piel con tendencia atópica.
• Identifica todo lo que pueda ser potencialmente alergénico o irritante. Evita que materiales como la lana estén en contacto con tus orejas y opta, por ejemplo, por el algodón.
•  Si nadas a menudo, utiliza tapones de silicona para los oídos y considera la posibilidad de utilizar cremas de barrera protectora para aplicar sobre la piel antes de nadar.

Alivio del eczema de oreja alérgico

• Lo primero que se debe hacer es aliviar la irritación y la comezón aplicando una crema calmante de cobre y zinc, o una crema de cortisona recetada por el médico. 
•  Por supuesto, también es necesario identificar y eliminar el alérgeno o irritante que está causando el eczema de oreja, como pendientes o productos cosméticos. Para ayudarte a identificar el alérgeno, tu médico puede realizarte pruebas cutáneas de alergia, o incluso análisis de sangre si es necesario.

Pasos diarios

Sea cual sea la causa de tu eczema de oreja, aquí se describen algunas medidas que puedes tomar a diario: 

• Recuerda lavarte bien las orejas con un algodón húmedo para limpiar la zona que las rodea, sin introducirlo en el conducto auditivo: nada de gestos invasivos.
• Seca suavemente el interior y el exterior de las orejas en lugar de frotar. Otro consejo es utilizar el secador de pelo de vez en cuando, a baja temperatura, si notas que la oreja sigue húmeda. En lo posible, evita rascarte o frotarte las orejas.
• Evita los cambios bruscos de temperatura y humedad.
• En lo posible, evita el uso de bastoncillos de algodón.
• Si sientes comezón: aplícate frío localmente; córtate las uñas cortas para no dañar más la piel; es más fácil decirlo que hacerlo, pero intenta pensar en otra cosa mientras mantienes las manos ocupadas (actividad manual, por ejemplo) o practica técnicas de respiración.